El guerrero pacífico…

¡Cuántas cosas nos transmite esta película y qué gran reflexión podemos hacer!

Es una película basada en el libro autobiográfico Way of the Peaceful Warrior, del ex-deportista Dan Millman.

Basada en hechos reales, cuenta la vida de Dan Millman (Scott Mechlowicz), un joven universitario con el sueño de ganar la medalla de oro de los Juegos Olímpicos. Vivía obsesionado por conseguir esa medalla. Su actitud, con elevadas expectativas, que cada vez le generaban un mayor malestar e inseguridad, habían hecho que dejara de disfrutar, tomando su vida una naturaleza sin sentido.

A partir de un desdichado accidente, con una lesión importante en la pierna que le deja secuelas crónicas, se ve interrumpida su trayectoria deportiva. En ese momento, se desvanece su gran sueño de un futuro como deportista de élite.

¿Cómo es «vivir la vida siendo uno mism@» en la película?

Sócrates es un personaje que genera un impacto importante en su vida y es quien a través de preguntas despierta en Dan la reflexión que le lleva a cambiar la forma de ver y enfrentar la vida. A través de sus enseñanzas Dan se ve inmerso en un proceso de crecimiento personal. Va dándose cuenta de que no todo en la vida es conseguir premios o ser el mejor, sino que debe vivir, experimentar y disfrutar cada momento de su vida al máximo porque es único (vivir el presente). La felicidad no se encuentra en la meta sino en cada paso que realiza para llegar a ella.

Sócrates le instruye para que aprenda a atender y disfrutar de cada momento de su vida, desarrollando la destreza para atender a todos los aspectos de su entorno comenzando por pequeñas acciones que, poco a poco, se van haciendo más complejas.

La verdadera esencia de esta película es que únicamente con un buen entrenamiento mental se puede vivir la vida siendo uno mismo, dejando que la magia de uno mismo fluya. Se puede disfrutar de verdad de lo que a uno le apasiona apartando toda distracción de la mente (pensamientos) que nos pueda desviar del camino hacia nuestro propósito de vida. Es como un viaje con parada en diferentes estaciones: consciencia, autoconocimiento, aceptación, responsabilidad y acción, llegando a la última estación de aprendizaje y crecimiento personal.

Algunas de las citas de Sócrates para ayudar a Dan en este proceso son:

“Saca la basura de tu mente. Basura es todo aquel pensamiento que te distraiga de lo que realmente importa: estar presente plenamente en este momento, aquí, ahora”.

Constantemente estamos preocupados por lo que nos ha pasado (el pasado) o por lo que tememos que nos pasará (el futuro); sobre lo que realmente no tenemos control. Y todo ello, inmersos en un presente que queda enterrado por esas experiencias pasadas sobre las cuáles aún a día de hoy les dejamos un espacio que no deberían tener. A lo que se añade, esas presuposiciones y expectativas de lo que nos puede devenir que nos limita en nuestro avanzar, en ocasiones, con diversos temores.

Ese presente, ese aquí y ahora, ¿qué experimentamos?, ¿qué sentimos?, ¿cómo actuamos?, que pasa desapercibido a los ojos de muchos de nosotros, apenas apreciando y vivenciando esos pequeños momentos que son la esencia de la vida, es lo que realmente importa.

“No es triste que la gente muera, lo verdaderamente triste es que la gente no sepa vivir”.

De ahí la importancia de ese entrenamiento mental para tener la mente enfocada en el momento presente, en el “aquí y ahora” y poder disfrutar de esos momentos deshaciéndote de pensamientos que te distraen de lo verdaderamente importante.

“La única y verdadera felicidad se esconde en el camino, y tú eres la única persona de tu vida que puede recorrerlo”.

¿Dónde buscamos la felicidad? En objetos materiales, en un viaje, en el reconocimiento social, académico, laboral, etc. pero ¿realmente la encontramos? No.

Como dicen los grandes pensadores como Platón y Sócrates la felicidad no es algo que hay que alcanzar como un fin y llegar a un determinado momento en el que lo conseguimos, como tampoco proviene de recompensas externas, sino más bien nace de un estado interno siendo el fruto de cómo hemos vivido aquello que hemos ido consiguiendo en la vida.

 “La vida es elegir. Puedes elegir ser una víctima o cualquier otra cosa que te propongas”.

Si escoges ser víctima das el poder de tu propia vida a otros y no asumes la responsabilidad de tus acciones. Piensas que no tienes control sobre las circunstancias y tiendes a culpar a otros sobre lo que te ocurre o la mala suerte que crees que tienes. Tiendes a anclarte en el pasado.

Por otra parte si eliges ser el Protagonista de tu vida, estarás tomando las riendas y asumiendo la responsabilidad de tus acciones, decisiones y/o elecciones. Te ves a ti mism@ como parte del problema para ser parte de la solución. Tomas el pasado como aprendizaje promoviendo acciones para mejorar el futuro.

En definitiva, tu actitud determinará tus acciones y tus acciones determinarán el camino de tu que seguirás en tu vida.

“Se más de lo que piensas y piensa más de lo que sabes. El conocimiento no equivale a sabiduría”.

El sabio no es aquél que sabe mucho, sino el que ha tomado acción, el que se ha equivocado, el que ha fallado y precisamente, de esos fallos ha sido de los que ha tomado un aprendizaje.

“Las personas no son lo que piensan que son. Sólo creen serlo.” 

Nos identificamos con nuestro propio pensamiento, confundimos nuestra identidad con el contenido y la actividad de nuestra mente. Nos formamos una imagen mental de nosotros mismos, el ego, que sólo puede funcionar mediante el pensamiento constante.

Mientras uno siga identificándose con su mente no será libre. No somos nuestras sensaciones ni pensamientos, porque van y vienen; tampoco somos nuestras ideas, que cambian continuamente. Lo que sí somos es los que tenemos esos pensamientos, ideas, sentimientos.

Esta tendencia a la identificación, nos trae dificultades ya que es la causa de preocupaciones, malestares, decepciones, ansiedades…

Ahí es donde a través del entrenamiento mental se puede realizar un importante trabajo de introspección, un trabajo en el que dejes de estar completamente centrado en lo externo, para poco a poco, ir conectando con tu verdadero, autentico y profundo Yo.

En la medida en que profundizamos y vivimos desde nuestro Yo, comenzamos a llevar las riendas de las distintas situaciones de nuestra vida.

 “Cuando por fin logres vivir el presente, te sorprenderá todo lo que puedes hacer y lo bien que lo haces”

La solución es librarnos de la “basura”, de nuestro ego, tomando distancia siendo el observador. 

De esta forma si aprendemos que nosotros no somos nuestros pensamientos, emociones o sentimientos no nos identificaremos con ellos. Si hay un estado de malestar dentro de mí, lo veo, lo percibo, siento, pero no soy ese estado de malestar.

Ello nos llevará a alejarnos del pasado y del futuro, donde uno no puede intervenir, ya sea porque son realidades que ya han ocurrido o porque aún no se sabe cómo transcurrirán y, nos enfocará a centrar la atención en el presente, haciéndolo todo mucho mejor.

“Un guerrero no se rinde ante lo que le apasiona, encuentra el amor en lo que hace. Cuando tengas miedo utiliza la espada, llévala hasta ti, y corta tu mente en pedacitos… Destruye todos los miedos y temores, el resto vive en el pasado o en el futuro”.

Ser guerrero no es ser perfecto o salir victorioso o ser invulnerable, el guerrero es totalmente frágil, es su único coraje.

Es importante no rendirse ante los sueños y aceptar que no controlas todo lo que te sucede. Lucha contra esos miedos interiores desde tu paz interior, calmando tu mente, para poder comprenderte y aceptarte y, liberar la mente de lo que no sirve, viviendo y sintiendo esa experiencia. No te aferres a ese futuro que todavía no existe, que está por venir para transformarlo en tu ansiado presente, y olvides el presente en el que te encuentras ahora que luego es pasado, habiendo perdido la oportunidad de vivir y disfrutar el momento a momento. Céntrate en el aquí y ahora, para disfrutar de cada paso del camino. Es posible que no llegues a donde te propongas o quizás cuando llegues no es lo que esperabas, aun así habrás disfrutado de todo lo que has pasado hasta llegar ahí, que es lo verdaderamente importante.

Todas esas citas que aparecen en la película, nos llevan a reflexionar sobre la gran importancia del entrenamiento mental para conseguir vivir el “aquí y ahora”. En dicho entrenamiento es fundamental sacar “la basura mental” para alcanzar la sabiduría, descubrir la fuerza interior y despertar ese verdadero guerrero que hay dentro de cada uno de nosotros.

¿Qué despiertan en ti las siguientes preguntas?

¿Eres feliz con tu vida?

¿Consigues descansar y estar tranquilo después de las agotadoras horas que dedicas a tus propósitos?

¿Qué te angustia, te quita el sueño y te impide disfrutar?

¿Qué pasa si algo no sale cómo lo has planeado?

¿Cómo quieres vivir tu vida?

¿Cómo puedes hacerte responsable de las riendas de tu vida?

¿Qué estás haciendo ahora que podrías mejorar?

 

Ahora ya sabes como, vivir la vida desde el «Aquí y ahora», puede ayudarte en tu bienestar. Puedes dejarme en los comentarios si ya habías oído hablar de los beneficios de llevar tu mente al presente o si te gustaria empezar a hacerlo. 🙂

Soy Lídia Palou, psicóloga especializada en ayudar a personas que viven en un estado de constante alerta, viéndose arrastradas por pensamientos perturbadores, emociones difíciles y preocupaciones excesivas, impidiéndoles poder disfrutar en su vida de momentos de calma y tranquilidad.

www.lidiapalou.com

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